Me hace feliz darme cuenta de todas las experiencias que he vivido gracias a tener en mis manos una pequeña cajita negra llamada cámara fotográfica. La cantidad de personas tan interesantes que he tenido la oportunidad de conocer, los lugares tan increíbles que he visitado y los eventos que he podido documentar en primera fila.

Veinte años de experiencia se dice fácil, pero ha sido un largo camino de constante aprendizaje en el que me he esforzado no sólo por mejorar mi técnica, sino por además retarme a mí mismo y empujar mis límites un poco más cada vez. ¿Lo he logrado? No lo sé, pero ha sido muy divertido.

Espero pronto tengamos la oportunidad de colaborar en algún proyecto. Mientras tanto, cuídate y toma mucha agua.